Los profesionales de la Pajarona aseguran que si te instalas en una casa rural puedes visitar rincones únicos y mágicos del entorno, llenos de naturaleza y disfrutar de una fantástica gastronomía.
España es un país que destaca por el arte, la arquitectura, la cultura y la gastronomía. Una buena opción es elegir una casa rural para descubrir la gastronomía local y desconectar del estrés de la ciudad.
Para tus vacaciones te puedes instalar en una casa rural y disfrutar del enoturismo, por lo que vas a poder visitar las bodegas, la cultura, la historia y las costumbres que hay alrededor del vino.
La Asociación Española de Enoturismo, agrupa a importantes entidades del sector del vino y se encarga de fomentar este tipo de turismo.
El turismo rural también te permite ver cómo se fabrica la cerveza o dónde se elaboran los quesos. Un plan perfecto con toda la familia es visitar las fincas agrícolas y explotaciones ganaderas, para ver los productos ecológicos de la tierra y disfrutar de los animales. Otra actividad muy divertida y que puedes compartir con los más pequeños, es la recogida de hongos y setas.
El mundo rural proporciona alimentos naturales, muy saludables y necesarios. Además, de un aire puro y paisajes rodeados de naturaleza.
En esta escapada rural vas a poder disfrutar de la gastronomía popular, con tradicionales platos cocinados con excelentes carnes, pescados, hortalizas frescas, también de una gran variedad de embutidos, quesos, conservas caseras, vinos, licores artesanales, mermeladas, miel ecológica, dulces típicos del pueblo, y sin olvidarte del AOVE (Aceite Oliva Virgen Extra).
La mejor manera de descubrir nuevos paisajes y degustar los productos locales es caminar por diferentes rutas. La gastronomía rural es tradicional, la de las madres y abuelas, la que hay que conservar y no perderla, para que las futuras generaciones puedan conocerla y disfrutar de ella.
Además, se elabora con productos de temporada, de la zona, con una alta calidad y sin perder la exquisitez. Según los datos ofrecidos por el Observatorio del Turismo Rural de 2016, casi un 20 % de los turistas rurales practican viajes por la enogastronomía.
Los beneficios de consumir una gastronomía rural
Los principales beneficios son:
Conservan más su sabor natural
Se recolectan en su punto máximo de madurez en lugar de recolectarse temprano para ser enviados y distribuidos. Sus platos conservan un sabor natural y más rico.
Productos de temporada
Vas a poder disfrutar de los productos de temporada, ya que tienen mejor sabor que los disponibles fuera de temporada, que han viajado miles de kilómetros y se han recolectado antes de que maduren.
Más nutrientes
Pasan por un período más corto entre la cosecha y nuestra mesa, por lo que los alimentos tendrán más nutrientes.
Beneficios para el medio ambiente
Consumir productos locales permite un ahorro energético y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, ya que los medios que transportan los productos desde lugares lejanos añaden al ambiente más emisiones.
Mejora su economía
Este tipo de gastronomía supone una enorme oportunidad para las zonas rurales para impulsar un mayor desarrollo social, una mejora de sus economías, un incremento de sus ingresos, una importante regeneración territorial y apoyo a los pequeños productores locales.
Además, la gastronomía rural está conectada a través de mercados, festivales, historias y recetas.
Beneficios de consumir carne de caza
Si te apetece disfrutar un plato de carne de caza en un ambiente rural, tienes que conocer cuáles son sus beneficios en la salud:
-Se caracteriza por un color rojo más oscuro que el de las especies domésticas, esa tonalidad aumenta a medida que el animal cumple edad.
-Tiene menos contenido en grasa, cuanto más joven es el animal menos grasa aporta.
– Carece de residuos hormonales, antibióticos y otros fármacos.
-Aporta un alto contenido en hierro, fósforo, magnesio y potasio.
– Las proteínas de alto valor biológico, contienen los 9 aminoácidos esenciales, fomenta la formación de anticuerpos.
Además, de estos beneficios para la salud, es necesario consumir carne de caza, porque apoyas al producto local y de temporada, y colaboras con la conservación del entorno rural.
Disfrutar de los platos típicos de la zona
Con este tipo de gastronomía, puedes degustar platos caseros, tradicionales y con una gran historia como: los gazpachos manchegos que tienen carne de caza, los caracoles, el atascaburras, las migas, los asadillos, cocidos, las gachas del pastor, el cordero al horno, el queso con aceite de oliva, escabeches de perdiz, platos con azafrán, etc.
También puedes disfrutar de un gran variedad de tapas: Flauta de morcilla o chorizo, queso frito, arroz…
Para los golosos también pueden disfrutar del turismo rural con los dulces artesanales, sus ingredientes son naturales y no contienen aditivos. Algunos ejemplos de estos postres son: las empanadillas de cabello de ángel, las natillas, el arroz con leche, los dulces fritos con miel ecológica…