Es una buena opción con los meses de frío instalarte en un albergue rural cerca de la montaña, es un sitio muy acogedor donde dormir, comer, disfrutar de su amplia oferta de actividades y la posibilidad de obtener información turística del lugar.
La Real Academia Española (RAE) define el término de turismo rural como «actividad turística que se realiza utilizando como alojamiento las casas de una localidad rural».
En invierno apetece descansar en una casa rural junto a la montaña, relajarte delante del calor de una chimenea o disfrutar de las vistas de los bosques nevados. Parece un sueño, pero si lo deseas se puede hacer realidad. Es un lujo disfrutar de los paisajes invernales, los pueblos medievales rodeados de montañas o pasear por los parques naturales.
Los profesionales de La Jarilla explican que el albergue rural es un sitio idóneo donde desconectar y reencontrarse con la naturaleza, de acuerdo con la filosofía de un estilo de vida sostenible.
Ventajas de instalarte en un albergue rural en invierno
Veamos cuáles son las ventajas de visitar una casa rural en invierno con tus familiares y amigos.
-Sentarse delante de la chimenea y disfrutar de un vino o una taza de café, es un momento de relax, perfecto para descansar y dejar atrás el estrés de la ciudad. Puedes acompañar ese momento de paz con la lectura de tu libro favorito.
– Disfrutar de la belleza del paisaje, las montañas y las explanadas nevadas nos traslada a un ambiente muy acogedor.
-Que el frío no te pare para salir a disfrutar de la naturaleza o la tierra mojada por la lluvia. Puedes entrar en calor probando la cata de vinos típicos del pueblo o con una deliciosa taza de chocolate caliente con los dulces tradicionales y churros.
– En invierno es una época más tranquila, ya que en verano son épocas en las que la población de los pueblos crece consideradamente.
-En época de frío puedes disfrutar de elementos muy diferentes al resto del año, como fuertes cocidos o platos calientes típicos del pueblo.
-Estar junto a la chimenea o en la habitación y escuchar la lluvia te hará desconectar de los problemas, además de que es muy relajante.
-Otra de las ventajas es levantarte por la mañana y tomarte una taza de café caliente en la terraza bajo los primeros rayos de sol.
-Si el albergue tiene bañera de hidromasaje o piscina climatizada, vas a poder disfrutar de un buen baño de burbujas o de diversión con los más peques.
-Con los meses de frío puedes disfrutar de otras actividades deportivas como el esquí. Aprovecha el frío y la nieve para realizar este deporte junto con los amigos.
– No puedes abandonar el albergue rural sin haber practicado el senderismo, a través de este deporte vamos a conocer los paisajes, la naturaleza o los bosques que nos rodea en ese lugar.
-Puedes aprovechar las rutas para recoger productos ecológicos de la temporada como castañas, alcachofas, patatas, granadas…
-En plena naturaleza puedes visitar aves como el buitre negro, buitre leonado, águila imperial, águila culebrera, garza, cigüeña…En los albergues también reciben visitas de las aves nocturnas como lechuza, búho chico, mochuelo, cárabo y búho real. Esto le permite a los niños conocer las distintas especies de aves.
-Otra experiencia que no vas a olvidar con esta escapada rural es disfrutar de los cielos con millones de estrellas.
-Apúntate a la actividad de escalada de roca, ya que es una actividad muy divertida tanto para los niños como para los adultos.
-Otra actividad que muchos prefieren practicarla con el frío es el ciclismo en las montañas, ya que no corres el peligro de sufrir una insolación.
-Visitar los parques nevados, disfrutar del típico olor de la tierra mojada o ver como caen las gotas de las hojas, es una gran oportunidad que te ofrece la naturaleza en los meses más fríos y debes aprovecharla.
– Visitar los animales de la granja, es una manera de conocerlos y aprender a ordeñar una vaca o montar a caballo.
-Conoce el huerto y los productos de temporada, esta actividad es recomendable para que asistan los niños, porque así aprenden lo importante que es la alimentación saludable.
-Una tarde de lluvia con pijama y acompañada de la familia mientras jugáis a las cartas o al ajedrez. ¡Será una experiencia inolvidable!
Disfrutar de unas vacaciones en invierno en un albergue rural tiene un montón de ventajas y actividades que te harán conectar con la naturaleza, la nieve, los platos calientes, la lluvia, los productos ecológicos, etc. ¡Apuesta por el turismo rural en los meses con bajas temperaturas!